¿Qué son las emociones, para qué sirven?
Las emociones son un sistema de navegación interno y junto con los sentimientos y sensaciones corporales, nos muestran que es lo importante para nosotros y que hay que atender en determinada circunstancia.
Sí aprendemos a hacer lo correcto con las emociones, estas se podrán convertir en herramientas que nos proveen de la energía que necesitamos para resolver situaciones que lo requieran.
Ahora bien, el equilibrio emocional es la capacidad de experimentar cada emoción. Un ejemplo de esto puede ser; aprender a pedir perdón, a poner límites, a manejar otro ritmo de trabajo o de actividades.
Para esto es fundamental darnos más tiempo de introspección, de soledad y de reflexión, escribir, llorar y desahogarnos, alternándolo con momentos de compañía significativa, con personas que nos nutran, consuelen y que nos ayuden a reflejar aquello que por nosotros mismos no podemos ver, muchas veces necesitamos de un observador externo.
¿Cómo se relacionan las emociones y los pensamientos?
Todos interpretamos la realidad de forma diferente
Recuerda que todos percibimos el mundo a través de un filtro formado por nuestros sentidos y nuestras interpretaciones, así que el mismo suceso puede dar lugar a emociones muy diferentes según el pensamiento de cada persona.
Imagina la siguiente situación:
Vas caminando por la calle y alguien te mira fijamente con el ceño fruncido ¿Qué pensarías?
A. Tiene algo en contra de mi
B. Es probable que no sea conmigo
C. Parece enfadado, pero soy más fuerte que él/ella
La emoción que se genera a partir de los pensamientos puede ser diferente en cada persona (miedo, enojo, sorpresa, fastidio, alegría); es así como la emoción y el pensamiento están íntimamente ligados, ya que si tienes una interpretación negativa de una situación esto puede acarrear emociones desagradables y viceversa.
Es importante cuestionar las interpretaciones que hacemos de la realidad para logar pensamientos constructivos y objetivos
¡PIENSA BIEN,
SIÉNTETE BIEN!
Cuando te sientas colapsada por alguna emoción (como el enojo, la frustración o el miedo) has el siguiente ejercicio de respiración.
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